La obesidad en los animales de compañía

La obesidad es un problema cada vez más frecuente entre los animales de compañía.

Estamos hablando de no solo un problema estético sino de salud. Consideramos que un animal es obeso cuando excede entre un 10% y un 20% de su peso ideal.

Si bien es cierto que ante un animal con sobrepeso hay que descartar ciertas patologías que nos pueden inducir a ello como son el hipotiroidismo, la acromegalia o afecciones cardiovasculares, las principales causas de la obesidad son el sedentarismo y una incorrecta alimentación.

Entre las patologías que pueden desencadenarse o al menos agravarse en un animal con sobrepeso nos encontramos con la osteoartritis y las alteraciones cardio-respiratorias en el perro, y con la diabetes, la hipertensión, las alteraciones dermatológicas por falta de acicalamiento, las alteraciones hepáticas y los problemas cardiovaculares en el gato.

Es por todo ello y no solo por un problema estético, que debemos mantener a nuestras mascotas en su peso ideal y si no lo están, tratar de alcanzarlo. Cuando no hay una patología subyacente debemos enfocarnos en dos lineas de actuación.

La primera de ellas es la actividad física, debemos tratar que nuestros animales realicen ejercicio, ya sea mediante paseos más largos, o jugando con ellos a través de pelotas, láseres, o cualquier tipo de juguete que les estimule.

La segunda es mediante la alimentación. Hay multitud de dietas disponibles que nos van a permitir una reducción de peso. Son dietas ricas en fibra y bajas en grasa, siempre deben tener además una buena proporción de proteínas de alta calidad así como de carbohidratos complejos.

Siempre es aconsejable que se realice una monitorización semanal por parte de personal veterinario.

Julián Martín